Todos queremos ser inteligentes, pero ¿que entendemos sobre qué es ser inteligente?
Por lo general se confunde con ser exitoso ya que se tiene la idea de que las personas que lograron algo en la vida son inteligentes si bien lograr algo en la vida es subjetivo porque para cada persona es diferente, personal y único.
Para algunos será haber finalizado una carrera profesional, para otros haber formado una familia, para otros ser famoso, y así seguiría infinitamente la lista.
La definición de Inteligencia siempre fue discutida ya que no se ha logrado encontrar la definición correcta, pero básicamente es una “capacidad” que posee un individuo y se evalúa en superdotación (genio), Inteligencia superior a la norma (Altas Capacidades), Inteligencia media (dentro de la norma) e Inteligencia inferior a la norma.
En el mundo entre un 2% y un 5% de la población es superdotado y entre un 20 y un 30% es Altas Capacidades.
¿Como se reparte la Inteligencia?
En realidad la inteligencia es hereditaria por parte de un padre o de ambos, por lo tanto se sabe que cuando se evalúa un niño y es Altas Capacidades se sabe al menos que uno de sus padres también lo es.
Hace muchos años cuando se comenzó a medir la inteligencia se medía el Coeficiente Intelectual. Las técnicas utilizadas para medirlo prácticamente solo evaluaban la parte lógica, analítica, analógica y numérica del individuo y de esa manera se determinaba su CI.
Con los años y los diferentes estudios se observó que no existe solo ese tipo de Inteligencia sino que hay múltiples.
Es decir, la persona que es inteligente es inteligente pero no solo en esa área sino también en otras, por lo tanto la inteligencia dejó de ser numérica únicamente, para convertirse en diferentes áreas del ser humanos que evaluándolas podemos obtener percentiles que nos permitirán determinar cuál de mis áreas está más desarrollada y esto permitirá a los profesionales y especialistas potenciarlas y seguir desarrollándolas.
Es aqui cuando se empieza a hablar de inteligencias múltiples: visual-espacial, musical, corporal, Interpersonal, lógica-matemática, intrapersonal, lingüística-verbal, naturalista.
De todas maneras lo que importa hoy más allá de su definición y/o diferentes tipos de inteligencias es …
¿Que hacemos con ella?…¿Que hacemos con la Inteligencia?
El tener un Coeficiente Intelectual alto ha demostrado que no es indicador de ser exitoso, de hecho en muchos casos no ha sido así, es aquí donde aparece la inteligencia emocional.
¿Que es la Inteligencia emocional y quien la posee?
Se puede decir que aquellas personas que tienen habilidades o capacidades tales como empatía, capacidad de adaptación, flexibilidad entre otras tantas, ya que sus logros son mayores que los que tienen un coeficiente intelectual altísimo, a estas personales se las califica como personas con inteligencia emocional.
Por lo tanto lo que nos define como exitosos no es nuestro Coeficiente Intelectual sino como nos paramos frente al mundo. Como lo vemos, actuamos y nos preparamos para los distintos acontecimientos actuales y futuros.
Lo que hace que una persona pueda ser definida como inteligente, son aquellas personas que frente a diferentes sucesos en su vida las confrontan y buscan en forma “creativa” soluciones.
Por lo tanto, debemos empezar a pensar como frente a algo que esta sucediéndonos como lo puedo enfrentar con “Resilencia”.
¿Y que es la resilencia?
Es la capacidad de levantarse y seguir adelante a pesar de todo y todas las cosas que nos suceden en la vida. Hay muchos casos famosos y conocidos de personajes de la historia y recientes, que frente a hechos desgraciados o perjudiciales han encontrado “el como” seguir adelante a pesar de todo.
Quizás podría decirse que ser Inteligente es igual a = Creatividad + Resilencia.
¿Que quiero decir con esto? Que las personas que con creatividad encuentran la solución o diferentes opciones frente a diferentes escenarios y perseveran a pesar de todo, muestran que tienen una capacidad especial que los define como personas inteligentes.
Ya que después de todo en la vida lo que importa es como nos enfrentarnos con nuestras debilidades y problemas cotidianos y hacerles frente tomando la decisión más justa en ese momento para cada situación.
No olvidemos que más allá de todo, somos personas que poseemos sentimientos, emociones, sensaciones y que después de todo al final de nuestra vida lo que habrá importado es el “como vivimos lo que vivimos”.
Licenciada en psicología Adriana Gimenez– Psicóloga – Coach especializada en Altas Capacidades.
