Creo que no hay vez que cuando una persona le cuenta un problema a la otra …esta ultima le dice …y es que no le pusiste limites! Es más, sin van a terapia/psicoterapia, se encontraran que el psicólogo les planteara que deberán empezar a poner limites!.
…pero que es esto de poner limites? y además, como pongo limites en mis relaciones con los demás?
En las relaciones humanas, en especial cuando nos relacionamos con el otro tiene que quedar claro desde el principio cuales son si se pudiera decir así, las reglas de juego, en este caso son que para que yo me pueda relacionar contigo sin que tu me invadas mi espacio físico, psíquico, etc. tienes que entender y tener claro hasta donde puedes llegar…es decir…el limite.
Como se lo muestro al otro este limite?
Tanto si aun es un niño, un adolescente o un adulto no solo a través de la palabra sino a través de determinadas acciones que el otro entenderá que a partir de allí ya no puede por ejemplo: demandar, decidir por mi, etc.
Muchas veces funciona bien sentarse hablar y discutir el tema que nos preocupa o donde sentimos que sobrepasaron el/los limites porque como resultado me sentí mal. En otros casos en que la palabra no sirva se muestra el limites a través de las acciones.
Un ejemplo de esto es que actualmente las personas han encontrado la forma de poner limites a través de las nuevas tecnologías o las redes sociales.
No siempre es la mejor forma ya que se debería poder poner en palabras y decir lo que les está pasando, lo que les está molestando del otro o lo que les dijo que los hirió, ya que si no se hace el simple hecho de bloquear al otro, deja el tema en “pendiente” y se sigue con ese malestar.
Ademas como todavía el ser humano no es adivino, no siempre sabe o entiende que ese fue un limite, puede seguir insistiendo en tener una relación con alguien que en realidad no quiere.
Por lo tanto se debería pensar o ver como se puede poner un limite maduramente y eficazmente al otro desde la salud.
A veces puede resultar difícil verlo, o saber como hacerlo por eso es aconsejable buscar la ayuda o el soporte de algún profesional psicólogo para que te muestre y vayas aprendiendo a hacerlo, porque en la medida en que yo no pongo limites al otro muestra como tampoco tengo limites puestos hacia mi.
Esto se observa por ejemplo en ver cosas que nos hacen mal en la televisión o escuchar información que nos genera ansiedad o preocupación, el comer desmedidamente, el tomar alcohol sin control, el realizar compras compulsivas, etc.
Todos estos limites que yo no pongo en mi mismo, pero que sé que necesito hacerlo porque me están haciendo mal, muestran la dificultad que tenemos las personas en hacerlo también con los demás, ya que si no puedo ponerme un stop…Como se lo voy a poner al otro?.
Debemos saber usar el NO y además no tenerle miedo al decir NO.
Poner limites es sano, muchas personas lo relacionan con quitarle la libertad al otro, como por ejemplo con los hijos y sin embargo no es así, de hecho es todo lo contrario, solo a través de los límites, los hijos podrán responder a las vicisitudes de la vida sin problemas, con eficacia y control de si mismo y del otro.
“Empecemos por ponernos limites…para que de esta manera podamos hacer lo mismo con las personas”.
Licenciada Adriana Giménez – Psicóloga
